Edificios de Viviendas en Trinidad-Perchel, Málaga.

Participación en la Convocatoria con intervención de jurado de Selección de Adjudicatarios de Contratos de Servicios de 5 Edificios de Viviendas en Trinidad-Perchel, Málaga.

Redactores:     María José Márquez Ballesteros. Arquitecto

Manuel Rafael García López. Arquitecto

Manuel Cardona Navajas. Arquitecto

En el centro histórico descubrimos lugares con una importante relación del espacio doméstico con la calle. El zaguán, la pieza que hace dialogar el dentro y el fuera, es uno de ellos. El patio y la calle, tan presentes en los centros históricos, están separados en las nuevas edificaciones que se construyen en ellos, olvidando los lugares de transición. Volvamos a poner en diálogo los patios, las medianeras y la calle.

La configuración primigenia del proyecto se establece dejando respirar la zona más sombría del vacío, la medianera, el lugar que es capaz, tras un movimiento de cizalladura, de atravesar la fachada y configurar los espacios intermedios, los lugares híbridos entre el espacio doméstico y la calle, por donde la vivienda se asoma, y el dentro y fuera se entremezclan.

La casa fluye alrededor de este espacio, eje fundamental del proyecto que articula el interior a su alrededor, poniéndolo en contacto con la calle de una manera soslayada.

A través de estos vacíos se atraviesa toda la crujía de la pieza y una vez que llegan a la medianera, suben como chimeneas captadoras de la ventilación.

El edificio se configura como un volumen rotundo que se adecua a los colindantes. Cuando gira a calle Zamorano disminuye la planta bajo cubierta para resolver el encuentro con el edificio medianero, que cuenta con una planta menos.

La piel continua refuerza el volumen, nace en el plano vertical y se pliega hasta configurar el plano de cubierta. Esta piel se va perforando en los lugares donde el edificio se muestra al exterior, por donde respira desde el interior.

Los huecos se disponen como una reinterpretación de los cierros, unos miradores que se matizan dependiendo de las necesidades interiores de la vivienda.

En planta baja la piel se transforma en un zócalo, que responde a su uso público, donde se sitúan dos locales comerciales, y entre ellos se dispone el acceso a la vivienda, donde la pieza de circulaciones verticales deja a ambos lados las dos viviendas por plantas.

La organización del edificio son dos viviendas por planta, una de un dormitorio y otra de dos. En la planta bajo cubierta se ha situado otra vivienda de un dormitorio, la zona de tendederos y cinco lavaderos, uno por vivienda.